La exboxeadora Alejandra “Locomotora” Oliveras continúa internada en Santa Fe luego de sufrir un accidente cerebrovascular (ACV). En este contexto, Alexis Scotto, uno de sus hijos, habló sobre su estado de salud y compartió detalles esperanzadores de su cuadro clínico.
“Hay una mejoría, estamos muy contentos por estas buenas noticias. Los médicos dicen que está mejorando, que está estable, que respira por sí sola la mayor parte del día”, manifestó con alegría el joven, en diálogo con El Trece.
En esta misma línea, agregó: “Responde a indicaciones. Abre los ojos. En algunos momentos del día, abre la mano”. Al ser consultado sobre el nivel de consciencia de la deportista, indicó: “No sé si puede diferenciar quién habla, pero cuando le decís algo lo puede comprender. Eso es un avance grandísimo. Son signos muy buenos”.
Qué dice el último parte médico de la Locomotora Oliveras
Este domingo se dio a conocer un nuevo parte médico de la Locomotora Oliveras y los médicos confirmaron que mantiene respuestas motoras y neurológicas estables. De esta forma, cada vez necesita menos tiempo de asistencia respiratoria mecánica.
“Se continúa con el proceso de desvinculación de la asistencia respiratoria mecánica, con períodos más prolongados de respiración espontánea. Continúa bajo seguimiento permanente por parte del equipo de la Unidad de Terapia Intensiva. Su pronóstico continúa siendo reservado”, se lee en el informe.
Qué es un ACV isquémico y cuáles son sus principales síntomas
Un ACV isquémico (Accidente Cerebrovascular isquémico) es un tipo de evento cerebrovascular que se produce cuando una arteria que transporta sangre al cerebro se obstruye, lo que reduce o detiene el flujo sanguíneo en una zona cerebral determinada.
Como consecuencia de esta lesión, las neuronas de la zona dejan de recibir oxígeno y nutrientes. A continuación, se detallan los síntomas más frecuentes:
Pérdida súbita de fuerza o sensibilidad en la cara, brazo o pierna (especialmente de un solo lado del cuerpo).
Dificultad para hablar o entender el habla.
Problemas para ver con uno o ambos ojos.
Mareo, pérdida de equilibrio o coordinación.
Dolor de cabeza intenso sin causa aparente.
Fuente: La 100
